El atentado se realizó como las tres de la tarde y duró aproximadamente hasta las 7pm. Al parecer, el ladrón sufría algún tipo de alteración mental y pretendía ultrajar a la alumna, manifestaron las víctimas. 

La Junta Ampliada de Dirigentes estudiantiles de La Agraria se pronunció al respecto. También indicaron el robo de equipos de cómputo y materiales de laboratorio en el Centro Modelo de Tratamiento de Residuos (CEMTRAR) el cual perjudica a los universitarios en sus labores académicas.

"La seguridad en la universidad es un tema abandonado por nuestras autoridades desde hace mucho e incluso ya ocurrido anteriores incidentes (la muerte de un personal de seguridad en el 2010 por un robo) que merecían que la seguridad en la UNALM mejore, y hasta ahora no hay nada serio. Además el decano de la facultad sugirió explícitamente que los estudiantes no circulemos por nuestra seguridad por esa zona del campus, ¿cómo es posible que no podamos caminar tranquilos por nuestra universidad?Eso solo demuestra que las autoridades solo buscan soluciones simplistas para los problemas", expresa la dirigente estudiantil Ana Paula Rojas.

No es la primera que sucede un asalto en la universidad La Molina, ya que en diciembre del 2010 murió el vigilante Juan Manuel Bozzo al querer frustar el robo de dos CPU de computadoras.

La comunidad universitaria exige a sus autoridades mejorar las medidas de seguridad del campus, de aumentar las cámaras de vigilancia, de reforzar el cerco perimétrico, de fiscalizar a los personales de seguridad interna, de una mayor iluminación en las instalaciones y la compra de implementos básicos para el personal de seguridad como intercomunicadores.